El legitimo campeón

No es muy conocida mi afición al boxeo, la cual nació, en parte, por ver la saga de Rocky y escuchar “Eye of tiger”, pero quizás en su mayoría fue herencia de mi padre; los que no saben creen que boxear se trata de lanzar golpes a donde caigan, duro y tupido, pero nada está más equivocado que eso, golpear solo es parte de una estrategia, una estrategia basada en las aptitudes del peleador y del contrincante, por poner ejemplos básicos; la estatura y la velocidad, se utilizan para mantener la distancia  y para entrar y salir rápido, respectivamente, además de la técnica que se requiere. Periódicamente, surge una figura emblemática dentro de este deporte, algunos son inalcanzables, Muhammad Ali es prueba de ello, bien merecido esta catalogado como el mejor boxeador de todos los tiempos y estoy completamente de acuerdo con eso, pero ha habido otros; Mike Tyson conocido por su salvajismo, Foreman, Evander Holyfield, Joe Freeman (quien por cierto acaba de fallecer esta semana) por decir algunos; a últimas fechas, el campeonato de los pesos pesados, que es el de mayor prestigio, ha perdido cierto brillo, en mi opinión, Vitali Klitschko, el actual campeón, es uno de esos que pasara a la historia sin mucha relevancia, así que, el momento es de los pesos ligeros y más específicamente, el momento de un filipino que desde hace unos años se ha ido consolidando como, igual en mi opinión, el mejor boxeador del mundo en estos tiempos, si, me refiero a Manny Pacquiao, de quien nunca he puesto en duda su habilidad, hasta ahora.

Hace poco, se televiso un partido amistoso entre las chivas de Guadalajara vs el considerado mejor equipo del mundo, el Barcelona; uno de los comentaristas, no recuerdo quien, pronuncio una frase que resulto irónica para cuando el resultado estuvo decidido, dijo: “va a ganar el mejor equipo del mundo”. El resultado final fue 4-1 favor las chivas ¿y a que viene esto si estoy hablando de box? Bueno, resulta que ayer 12 de Noviembre del año en curso, dije algo parecido previo al combate que el pac-man sostendría contra Juan Manuel Márquez, haciendo alusión a lo ocurrido con el Barcelona-chivas, pronostique: “va a ganar el mejor boxeador del mundo” y es que me pareció atinado decir eso, porque si Márquez ganaba habría destronado a una leyenda y por derecho se habría ganado el titulo; en cambio, si Pacquiao ganaba, simplemente seguiría manteniéndose como tal. Mi anciano papi tampoco se quedó callado y prometió que si el mexicano ganaba disparaba los tacos, los cuales me quede esperando gracias a los jueces.

No estoy seguro de que pelea estuvieron viendo los jueces, lo único claro es que no fue la misma que yo vi, tal vez estuvieron viendo una repetición de la pelea que el filipino tuvo con Antonio Margarito, en la cual ese otro paisano fue superado por mucho, eso o los jueces previamente habían apostado a favor del Pac-man y al ver su inversión en peligro decidieron tomar el asunto en sus manos; Márquez hizo una pelea fabulosa, no dejo que el filipino tuviera el control en ningún momento, a eso le llamo hacer la tarea; Pacquiao, por su parte, hizo lo que pudo, pero no fue suficiente, por primera vez, desde que he prestado atención a sus peleas, fue superado, y no es una especie de patriotismo absurdo, estoy tratando de ser objetivo, pienso que deberían de haber hecho lo mismo, tanto los jueces, como la esquina del campeón  y el propio Manny, porque vamos a ser honestos, después que la campana sonara anunciando el final del doceavo round, el semblante del filipino y su mirada, eran los de un boxeador que está consciente del resultado y no hubiera habido nada de qué avergonzarse, pues la diferencia entre derrota y victoria es un golpe, un descuido, un pestañeo, cosas que propias del ser humano, pero no, así no son las cosas en el mundo y me pregunto si alguna vez fueron diferentes, a lo mejor sí, pero no tengo la certeza porque yo ni siquiera existía en los buenos viejos tiempos.

No hay que olvidar que el boxeo es un negocio millonario, no por nada le van a dar diez millones de dólares a Juan Manuel Márquez, aunque claro, esa cifra es mayor a la pactada, porque tal vez, y no quiero ser sizañoso, pero el aumento de números en el cheque sea una especie de control de daños; que el boxeo sea lucrativo es la única explicación lógica que encuentro para el veredicto de los jueces, porque quizás para el negocio no era bueno que Manny Pacquiao perdiera o que Márquez ganara, quizás también solo estén agitando las aguas para fraguar una revancha, quien sabe, la publicidad puede llegar a ser tan inverosímil como creativa; otra cosa que hay que señalar es que, a mi juicio, no creo que Pacquiao haya tenido algo que ver en la enajenación de las papeletas y no lo estoy justificando, porque también creo que en cualquier momento tuvo la oportunidad de negarse a retener el cincho, lo cual hubiera demostrado, que además de ser un excelente boxeador también es una persona de principios, pero de eso ya no hablare, porque uno puede echar pedradas desde aquí pero si estuviéramos en esa misma posición, quizás actuaríamos igual, porque ser considerado como el mejor “libra por libra” debe ser agradable.

Respecto a Juan Manuel Márquez me ha venido una idea a la cabeza que quiero proponer, tomando en cuenta que en nuestro país ha habido gobernadores legítimos y presidentes de esa misma categoría ¿Por qué no tener un campeón legítimo? Igual y así se nos pasa más rápido la indignación.

 Dato curioso: cuando estaba escribiendo la entrada una parte de mi cerebro estaba tratando de elegir el título de la misma, entre los cuales figuraron “De que están hechos los hombre”, “ejemplo básico de cómo se amaña una pelea”, “Tecate… por Márquez”, “Larga vida al nuevo champion”, “los jueces vs Márquez”  y otros que a lo largo de la mañana se me han ido olvidando, algunos resultaban mas irónicos, pero he querido compartir los que recuerdo solo porque me ha parecido curioso. Al final opte por el que me ha parecido más acertado y referente al mensaje central.